DIA 1- El Cairo

Llegamos a Egipto, nuevamente volamos en Emirates pero fue más de lo mismo, ya estamos exigentes en lo que es aerolíneas jaja. Una vez en el aeropuerto para hacer los trámites pertinentes, un quilombo importante!! Lleno de gente, todos gritando, hablando a la vez, una cola terrible que te daba la sensación de que íbamos a estar horas allí. No fueron horas pero si un buen rato. Después a buscar las valijas, aumento el stress y la locura porque se ve que había una convención de algo o simplemente viajó mucha gente para El Cairo porque era un caos pararse a esperar las valijas en la cinta. Ya con las valijas en mano salimos rumbo al hotel en los ómnibus contratados. 

Llegamos al hotel que tenía un shopping que estaba cerrado durante el día y abría tipo 19 hasta las 02:00, acá también estamos de Ramadán pero hay un poco más de "libertades" para el turista, pero igualmente no aconsejan salir solos por ahí porque al parecer Egipto está bravo, aunque a ese shopping no había problema. Dormimos una siesta porque como siempre habíamos volado en el primer grupo (que siempre era temprano en la madrugada), al despertarnos nos habían dicho que frente al hotel había un "supermercado"...descubrimos que no es universal ese concepto, le dicen supermercado a cualquier almacén de barrio. Caminamos y cruzamos las calles de los alrededores buscando ese lugar y nada, hasta que a alguien se le ocurrio "che...no será ese almacén el super???" entramos y compramos para salir del paso pensando en que más tarde nos iban a explicar bien donde estaba el super, en fin...estabamos dentro del tan buscado centro de expendio de alimentos. No tenía casi nada, pero para hacer refuerzos daba, alternábamos entre jamón y atún para variar un poco el sabor. Cuando el shopping abrió fuimos a recorrer un poco para matar el embole, no decía mucho pero verdaderamente estaba grande y re completo. Aprovechamos que estaba la tienda de vodafone y compramos un chip para tener internet en todos lados porque era bastante malo el del hotel.

Bueno, después de pasear un rato, ya cansados de hacer nada volvimos a la habitación a dormir porque al otro día nos esperaba un día bastante intenso. Las pirámides de Giza.