DÍA 2 – Palacio Buckingham, Big Ben, Abadía Westminster.
En la
mañana me quedé durmiendo un poco más ya que no podía levantarme. Ceci y Sandra
salieron a caminar por los alrededores para aprovechar el día. Llegaron hasta
el Palacio de Buckingham y pudieron ver el famoso cambio de guardia. Siguieron
caminando por el St. James Park y como sin querer llegaron al Big Ben.
Volvieron al hotel a buscarme para almorzar algo y volver a salir a caminar.
Ahí hicimos casi el mismo recorrido para que yo pudiera ver todos esos lugares.
Pasamos nuevamente por el Palacio de Buckingham, donde había quedado bastante
gente en los alrededores luego del cambio de guardia. Habíamos atravesado el
Hyde Park para poder llegar hasta allí, un parque muy lindo y muy grande donde
había gente haciendo deporte, descansando sobre el pasto y alimentando a los
patos que hay por los lagos. Luego pasamos por la Abadía de Westminster,
que es una iglesia gótica muy famosa por ser donde se dan las bodas reales y
por las coronaciones y entierros reales. Seguimos con destino al río Tamesis
para llegar a ver el tan famoso Big Ben. Al llegar a una esquina cerca ya se
podía apreciar el inmenso reloj, que es una de las torres del Palacio de
Westminster, sede del parlamento del Reino Unido. Un edificio inmenso y
hermoso, con una arquitectura que te deja mirándolo por mucho rato para ver
cada rincón y sus esculturas. Tomamos las fotos correspondientes, y cruzamos
hacia un puente donde había empresas que vendían paseos en barco por el
Tamesis. Ya estaban cerradas porque era tardecita, pero los precios estaban a
la vista así que decidimos cual íbamos a hacer al día siguiente. Recorrimos un
poco la zona viendo el Big Ben y el Palacio desde diferentes puntos para sacar
muchas fotos. Se hizo de noche y seguimos caminando sin rumbo, por el barrio,
para conocer lo que fuera. Nos metimos en unas calles que no tenían nada de
turístico, pero que eran lindas porque eran bien típicas londinenses. Mirando
el mapa logramos caminar hasta la estación de metro más cercana para volver al
hotel después de algunas combinaciones. Estaba fresco y no teníamos mucho
abrigo, así que compramos algo de comida y fuimos a comer a la habitación y a preparar
el segundo día de paseos por Londres.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario